París.- Los días de calma en la Fórmula 1 se han terminado. Sí, solo hemos tenido uno, el jueves. Cuando la famosa reunión del miércoles en la que claudicó Mosley, se produjeron ruedas de prensa, declaraciones, salieron artículos de todo tipo en la prensa y, concretamente, el presidente de Ferrari, Luca Cordero di Montezemolo dijo que se alegraba de que con el acuerdo, la F1 dejaría de estar en manos de un dictador.
Como es natural, el entrañable maduro se enojó mucho, y ha mandado una carta a Montezemolo con copia a los miembros del Consejo Mundial, exigiendo que el italiano se disculpe públicamente en rueda de prensa. Mosley ha amenazado con reconsiderar su no presentación a la reelección si el italiano no pide disculpas.
En un extracto de la carta Mosley le dice a Montezemolo "si deseas el acuerdo que hemos alcanzado para tener opciones de supervivencia, tú y la FOTA debéis rectificar vuestras acciones. Debes corregir los falsos testimonios que has hecho y pedir disculpas en una comparecencia de prensa. Al menos hasta octubre soy presidente de la FIA con la máxima autoridad”.
Montezemolo ya ha pedido disculpas, pero no como exigía Mosley, sino despejando balones y diciendo que los periodistas tergiversaron sus palabras y que él nunca diría eso de una persona que goza de su máximo respeto y consideración.
Estábamos muy tranquilos y otra vez empieza a caer agua. Lo lógico en estos momentos es que todos se dejen de falsedades e intrigas y se callen la boca y tengan la fiesta en paz hasta que la FIA cambie definitivamente de manos. Bastante daño han hecho ya todo a este deporte.
Vía │ GPUpdate
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